miércoles, 13 de marzo de 2013

Cuento :El pastorcito mentiroso


 ¿ Què enseñanza te deja?



Un pequeño pastor que cuidaba de su rebaño en una ladera alejada de su pueblo y al que le gustaba mucho llamar la atención, se puso un día a gritar angustiosamente:
-¡ahí viene el lobo! ¡Ahí viene el lobo! ¡Ayúdenme por favor! Que se va a comer mis ovejas!
Los aldeanos al oírlo, se asustaron mucho y abandonaron sus ocupaciones para correr a ayudarle.
Al llegar, el pastorcito muy satisfecho les dijo:
-Demasiado tarde! Acabo de espantarlo yo mismo
Admirados de que el muchacho se las hubiera arreglado solo volvieron a sus labores, totalmente exhaustos por la carrera.
Días después se volvió a escuchar el mismo grito:
-¡El lobo! ¡El lobo! ¡Socorro!
Y otra vez los habitantes del pueblo corrieron a ayudarle
Y el pastorcito los volvió a recibir con gran tranquilidad, afirmando con aire triunfador que el solo se había encargado de ahuyentar a la temida fiera. Lo mismo ocurrió otras 3 o 4 veces, hasta que los aldeanos del pueblo, molestos, empezaron a sospechar que se trataba de una broma y decidieron no volver a preocuparse más.
Un día sin embargo, una manada de lobos ataco de verdad el rebaño del joven pastor. Este grito y grito desesperadamente pidiendo ayuda, pero los de la aldea se rieron, pensando que se trataba de la misma burla y nadie movió un dedo para ayudarle. Cuando los lobos se fueron, al pastorcito no le quedaba ya ni una sola oveja.

Moraleja:
· Los mentirosos solo ganan una cosa: no tener crédito aun cuando digan la verdad.



Refranes de la honestidad:
- La mentira es como una bola de nieve: cuantas más vueltas da, mayor se hace.
- Más rápido cae un mentiroso que un cojo.
- Hay quienes son víctimas de su propio invento
- En la boca del mentiroso lo cierto se hace dudoso

domingo, 10 de marzo de 2013

cuento : los tres cerditos


                                                        
Esta semana trabajaremos la fàbula de los tres cerditos. Después de ver el vídeo te invito a practicar la lectura 


                                                     LOS TRES CERDITOS

Había una vez tres cerditos que eran hermanos, y se fueron por el mundo a buscar fortuna. A los tres cerditos les gustaba la música y cada uno de ellos tocaba un instrumento. El más pequeño tocaba la flauta, el mediano el violín y el mayor tocaba el piano...
Su vida podría ser tranquila y feliz, de no ser por el lobo feroz, que siempre que tenía hambre intentaba comérselos.
- Construiremos una casa, así podremos meternos dentro cuando venga el lobo y estaremos a salvo de sus fauces. - dijo el mayor de ellos.
A los otros dos les pareció una buena idea, y se pusieran manos a la obra, cada uno construyendo su casita.
- La mía será de paja - dijo el más pequeño-, la paja es blanda y se puede sujetar con facilidad . Terminaré muy pronto y podré ir a jugar.
El hermano mediano decidió que su casa sería de madera:
- Puedo encontrar un montón de madera por los alrededores, - explicó a sus hermanos, - Construiré mi casa en un santiamén con todos estos troncos y me iré también a jugar.
El mayor decidió construir su casa con ladrillos.
- Aunque me cueste mucho esfuerzo, será muy fuerte y resistente, y dentro estaré a salvo del lobo. Le pondré una chimenea para asar las bellotas y hacer caldo de zanahorias.
Cuando las tres casitas estuvieron terminadas, los cerditos cantaban y bailaban en la puerta, felices por haber acabado con el problema:
-¡No nos comerá el Lobo Feroz! - ¡En casa no puede entrar el Lobo Feroz!
De detrás de un árbol grande surgió el lobo, rugiendo de hambre y gritando:
- Cerditos, ¡os voy a comer!
Cada uno se escondió en su casa, pensando que estaban a salvo, pero el Lobo Feroz se encaminó a la casita de paja del hermano pequeño y en la puerta aulló:
- ¡Soplaré y soplaré y la casita derribaré!
Y sopló con todas sus fuerzas: sopló y sopló y la casita de paja se vino abajo. El cerdito pequeño corrió lo más rápido que pudo y entró en la casa de madera del hermano mediano.
- ¡No nos comerá el Lobo Feroz! - ¡En casa no puede entrar el Lobo Feroz! - cantaban desde dentro los cerditos.
De nuevo el Lobo, más enfurecido que antes al sentirse engañado, se colocó delante de la puerta y comenzó a soplar y soplar gruñendo:
- ¡Soplaré y soplaré y la casita derribaré!
La madera crujió, y las paredes cayeron y los dos cerditos corrieron a refugiarse en la casa de ladrillo del mayor.
-¡No nos comerá el Lobo Feroz! - Cantaban los cerditos.
El lobo estaba realmente enfadado y hambriento, y ahora deseaba comerse a los Tres Cerditos más que nunca, y frente a la puerta bramó:
- ¡Soplaré y soplaré y la puerta derribaré!
Y se puso a soplar tan fuerte como el viento de invierno Sopló y sopló, pero la casita de ladrillos era muy resistente y no conseguía su propósito.
Decidió trepar por la pared y entrar por la chimenea. Se deslizó hacia abajo... Y cayó en el caldero donde el cerdito mayor estaba hirviendo sopa de nabos.
Escaldado y con el estómago vacío salió huyendo hacia el lago Los cerditos no le volvieron a ver.
El mayor de ellos regañó a los otros dos por haber sido tan perezosos y poner en peligro sus propias vidas, y si algún día vais por el bosque y veis tres cerdos, sabréis que son los Tres Cerditos porque les gusta cantar:
- ¡No nos comerá el Lobo Feroz! - ¡En casa no puede entrar el Lobo Feroz!
FIN
Autor anónimo

Ahora te invito a analizar los personajes del cuento


El lobo, deseaba aprovechar cualquier descuido de los mismos para satisfacer el hambre que tenía.
Las personas muchas veces por alcanzar sus deseos no miden el mal que le pueden hacer a los demás

Los cerditos pequeño y mediano tomaron el trabajo más fácil  Aquí podemos observar la “facilidad” que quiere experimentar una persona para conseguir o querer conseguir algo sin que le cueste, aunque con esto pueda poner en peligro su vida.
Las personas muchas veces quieren hacer todo en la forma más fácil para obtener algo.

El mayor trabajaba en su casa de ladrillo en este se muestra “la seguridad” que quiere alcanzar la persona, buscando el más seguro y no por la vía fácil sino por los medios que la sociedad puede definir como correctos, por ejemplo: la adquisición de dinero por medio de un empleo.

El cerdito mayor puso al fuego una olla con agua aquí se ve reflejada “la inteligencia” adquirida por un conocimiento previo o muchas veces por el devenir de los acontecimientos que nos ayudan en nuestra vida diaria a enriquecernos.

El lobo comilón descendió por el interior de la chimenea, pero cayó sobre el agua hirviendo y se quemo"… aquí podemos observar “la ignorancia” que se puede poseer. Ya que en el afán que se vive diariamente no medimos las consecuencias que nuestras acciones pueden llegar a tener

En clase realizaremos un conservatorio sobre esta actividad.
'¿Què enseñanza te deja esta fàbula?